Descripción del título
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El problema de Dios es el alma de la fe y del sentido del hombre. Si la pregunta sobre Dios representa la función determinante en la vida y las acciones del hombre creyente y religioso, entonces su influencia en la teología como reflexión sobre la fe no debe ser superficial, sino profunda; no parcial, sino total; no ocasional, sino constante; no circunstancial, sino permanente y determinante. Nunca se alcanza un punto final en el problema de Dios; por eso debemos buscar a Dios sin descanso. Debemos esforzarnos por conseguir una verdadera imagen de Dios que se corresponda con el Dios revelado en la vida y el mensaje de Jesús. En nuestra época, el discurso acerca de Dios es cuestionado de múltiples maneras y goza al mismo tiempo de la máxima actualidad. El gran desafío de nuestro tiempo es buscar una respuesta sólida y fiable a la actual ambivalencia: puede observarse, por un lado, cómo brota un nuevo interés por Dios y la religión y, por otro, un ateísmo misionero agresivo y un extendido olvido de Dios, una secularización de la sociedad en curva ascendente, unida incluso a veces a una autosecularización de la misma Iglesia
Monografía
monografia Rebiun07369363 https://catalogo.rebiun.org/rebiun/record/Rebiun07369363 120509s2012 sp |||||| |00||| spa|| 978-84-293-2002-2 UM0603287 FTG 000000162976 UPSA (150354) UCVFT0123085 UDE 991001541299703351 CBUC 991043837519706706 UPSA. spa. esslup El problema de Dios, hoy George Augustin ... [et al.] (ed.) ; [traducción, Marciano Villanueva Salas] Santander Sal Terrae 2012 Santander Santander Sal Terrae 199 p. 199 p. Colección "Presencia teológica" 186 Traducción de: Die gottesfrage heute P. 173-197 El problema de Dios es el alma de la fe y del sentido del hombre. Si la pregunta sobre Dios representa la función determinante en la vida y las acciones del hombre creyente y religioso, entonces su influencia en la teología como reflexión sobre la fe no debe ser superficial, sino profunda; no parcial, sino total; no ocasional, sino constante; no circunstancial, sino permanente y determinante. Nunca se alcanza un punto final en el problema de Dios; por eso debemos buscar a Dios sin descanso. Debemos esforzarnos por conseguir una verdadera imagen de Dios que se corresponda con el Dios revelado en la vida y el mensaje de Jesús. En nuestra época, el discurso acerca de Dios es cuestionado de múltiples maneras y goza al mismo tiempo de la máxima actualidad. El gran desafío de nuestro tiempo es buscar una respuesta sólida y fiable a la actual ambivalencia: puede observarse, por un lado, cómo brota un nuevo interés por Dios y la religión y, por otro, un ateísmo misionero agresivo y un extendido olvido de Dios, una secularización de la sociedad en curva ascendente, unida incluso a veces a una autosecularización de la misma Iglesia Dios Fe Augustin, George Villanueva, Marciano Die gottesfrage heute